HOY, 19 de de 2024

Sandro Izaguirre

Act. residencia:lima peru
Ant. residencia:NO_DETERMINADO
Promo: 1989Colegio Carlos Pareja Paz Soldán (Rímac / Lima / Lima)
Mensaje:Recuerdos del cole, Lo primero que se me viene a la mente cuando pienso en el CPPS o pasoldán, como casi todos lo llaman, es una sarta de filofascistas que palo en mano pretendían arriar al alumnado. A estos tipos la burocracia los reconoce como auxiliares de educación, ausi para la gentita. Y justo ahora se vienen a la memoria algunos: el gordo Chávez, típico viejo criollo, bacancito, orangután de medio pelo. “Aquí el alumno viene a obedecer” le oí rebuznar en una ocasión. En fin, que te puedo decir, solamente que tú no chaves, Chávez., Arizaga, un zambito prepotente, también rimense, decían que era ex alumno lo cual no dudo por su escasa formación y preparación para la vida, una vez entró a mi salón, en esa época 2° F, y metió golpe a todo el mundo porque algunos, con justa razón, habían piropeado a una profesora suplente de historia. Tiempo después estuvo metido en líos por tráfico de notas junto a un tal Allauca., Rodríguez, supuesto estudiante universitario, temido y odiado, también le gustaba lucirse con su palmeta. Cabello cortito, cuello cortito, pequeño hombrecito todopoderoso en su pabellón, ese era robotito. Alguna vez, tijera en mano, quiso cortarnos el cabello a la mala, con sus ojitos casi oblicuos nos miraba con malicia para arruinarnos el cabello. No se lo permitimos. Desistió y ordenó a todos ingresar a los salones con su frase clásica: “un último”. Nunca lo vi reír, siempre seriecito el robotito., Cabrera, o Corcho, el típico cínico limeño, hipocritón, arribista, sobón y como los demás disfrutaba de su pequeña cuota de poder. “Este es un colegio de hombres”, me dijo una vez que lleve un bolsito andino. Los hombres a su cargo solían golpearlo a fin de año., Si hubo alguno que me cayó en gracia fue Marchena, hombre con pocos recursos, tenía más de cómico ambulante que de mandón. Pero todos, al fin y al cabo, ausis y tenían por misión cercenar a toda costa las libertades individuales y todo aquello que represente salirse del orden establecido: cabello largo, camisa afuera, hablar en voz alta, pensar diferente… vivir la adolescencia., Por supuesto, ellos ignoraban todo eso, dudo que se lo hayan cuestionado a sí mismos alguna vez, simplemente cumplían su labor deformadora sin dudas ni murmuraciones como manda el sistema. “Aquí el alumno viene a obedece”r, exclamará el gordo en su defensa. Puntualidad, disciplina y trabajo, responderá el ganado. Todos felices, todos contentos. (Sandro Izaguirre, Prom. 89) (06/09/04)

¿Conoces a esta persona? Te puedes poner en contacto enviándole un mensaje por medio del siguiente formulario:

Nota: Todos los campos son necesarios.