Profecías de la Gran Pirámide

Las Dramáticas Profecias de la Gran Piramide

Escritor mexicano predijo los cambios que enfrentamos en la actualidad

En la década del '60 del siglo pasado, el escritor mexicano Rodolfo Benavides escribió el libro "Dramáticas Profecías de la Gran Pirámide", en la que en virtud del estudio que hizo de la pirámide Keops en Egipto realizó profecías que se han venido cumpliendo.

Benavides señaló que "el pelo de mujer nacido en la cabeza de hombre, indicará que "Sodoma es de nuevo en la Tierra" y que las barbas crecidas serán símbolo de rebeldía.

Para esta época anuncia que aumentarán los malos entendido entre los gobiernos, proliferarán los armamentos y las probabilidades de guerra serán cada vez mayores.

Estados Unidos, señaló, aparecerá a la vista de los pueblos como el motivo y el eje de todas las injusticias y, cierto o no, el odio de la humanidad crecerá en contra de ese país, el mismo que ya no será y después se pensará de él que hace falta en el mundo.

La lucha por la conquista del Cosmos producirá víctimas, pocas al comienzo, muchas después. Se clamará contra este sacrificio, pero el Cosmos debe ser conquistado por el hombre. El alcance de metas como la Luna será difícil, pero mucho mas lo será Marte y Venus.

Los astronautas encontrarán en el cielo a viajeros de otros mundos. Se hablará entonces de cosmonautas, raptores de terrícolas desaparecidos. Luego se comprobará que desde hace tiempo nos han estado vigilando. Y se dirá de esos vigilantes que son invasores guerreros, pero después se comprobará que son seres de Dios, pues hablarán de paz y justicia.

Mas tarde pisarán la Tierra seres que se reconocerán como extraterrestres raros, pues se dirá de ellos que son "negros" y eso envalentonará a la raza negra terrícola que entonces se juzgarán de origen neptuniano.

Sutil e insensiblemente, China irá avanzando como una mancha de tinta amarrilla sobre el mundo, de tal manea que algunos estarán alarmados.

La degeneración en el mundo será incontenible, hombres y mujeres buscarán sexos y placeres nuevos. Las religiones, ya alarmadas por esto, se aterrorizarán y escandalizarán impotentes contra el caos que no supieron preveer ni prevenir. La sicología humana empeorará cuando el Sol entre en actividad explosiva y haya aumento de las manchas solares.

La ciencia asombrará con la creación de la maternidad cultivada que destruirá los lazos de amor. La maternidad artificial y la vida producida en laboratorio será de hecho un reto a la naturaleza, las religiones dirán que es un reto a Dios, pero nada harán porque nada podrán hacer, pues muerto ya el verdadero Amor, la dignidad y la vocación religiosa habiendo olvidado al Espíritu, las religiones no tendrán ya punto de sustentación, después serán perseguidas.

El cáncer y el sida no podan ser detenidos porque en mucho son enfermedades del alma y del espíritu y el hombre ignorará al alma y negará el Espíritu.

En el final de este periodo de desequilibrio, ruidos antes jamás imaginados harán que el pavor invada al hombre, entonces será el caos y los seres deambularán sin saber de sí mismos.

Los hielos polares comenzarán a derretirse y, por lo tanto, subirá el nivel de los mares inundando las zonas costeras, en tanto que los países del norte de Europa y de Estados Unidos serán cubiertos por hielos que obligarán a la evacuación progresiva de miles y miles de seres que deberán instalarse en lugares en donde puedan comenzar de nuevo su vida.

Cierto o no, muchas de estas cosas han sucedido o están por suceder.

Por: Raúl Dávila Herrera