Actividad física: Más vida, productividad, dinero y felicidad.

En pocas palabras, la actividad física y el ejercicio son importantes para todos. Los niños, adolescentes y adultos de todas las edades necesitan actividad física regular. La actividad física promueve la buena salud, y debe mantenerse activo en todas las etapas de su vida, independientemente de su tipo de cuerpo o IMC.

Comprender los beneficios de la aptitud física y saber qué tan activo debe ser puede ayudarlo a mantener una buena salud, mejorar su calidad de vida en general y prolongarla. Aquí hay algunos beneficios de la actividad física regular que demuestran la importancia de la buena forma física.

Ahorrar dinero

Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, las enfermedades crónicas causan 7 de cada 10 muertes en los EE. UU., y el tratamiento de enfermedades crónicas representa el 86% de los costos de atención médica de ese país. Si bien algunas enfermedades no se pueden prevenir, puede reducir el riesgo de ciertas enfermedades, como enfermedades cardíacas y diabetes, al reducir los comportamientos riesgosos y vivir un estilo de vida saludable.

Tomar decisiones saludables, como realizar una actividad física regular, puede reducir el riesgo de muchos problemas de salud y complicaciones que pueden resultar en una atención médica costosa.

Aumenta tu esperanza de vida

Numerosos estudios han demostrado que la actividad física regular aumenta la esperanza de vida y reduce el riesgo de mortalidad prematura. No existe una fórmula mágica que traduzca horas de actividad física en horas de vida ganadas, pero la investigación sugiere que las personas que son más activas tienden a ser más saludables y tienden a vivir más tiempo.

Reduce el riesgo de lesiones

El ejercicio regular y la actividad física aumentan la fuerza muscular, la densidad ósea, la flexibilidad y la estabilidad. La aptitud física puede reducir el riesgo y la resistencia a las lesiones accidentales, especialmente a medida que envejece. Por ejemplo, los músculos más fuertes y un mejor equilibrio significan que es menos probable que se resbale y se caiga, y los huesos más fuertes significan que es menos probable que sufras lesiones óseas si te caes.

Mejora tu calidad de vida

Un estilo de vida sedentario y la falta de actividad física pueden afectar el cuerpo de una persona. La inactividad física se asocia con un mayor riesgo de ciertos tipos de cáncer, numerosas enfermedades crónicas y problemas de salud mental. Sin embargo, se ha demostrado que el ejercicio mejora el estado de ánimo y la salud mental, y proporciona numerosos beneficios para la salud. Por supuesto, la condición física también le permite hacer cosas que de otra manera no podría hacer.

Mantenerse activo

Mantenerse activo y saludable le permite realizar actividades que requieren un cierto nivel de condición física. Por ejemplo, caminar hasta la cima de una montaña es una experiencia gratificante que infunde una sensación de logro y proporciona un paisaje espectacular, pero hay personas que no pueden experimentar esto debido a limitaciones físicas.

Pero incluso caminar por el zoológico con su familia o jugar en el patio de recreo con sus hijos puede ser un desafío para aquellos que descuidan la actividad física durante largos períodos de tiempo. Estar activo significa que es más fácil mantenerse activo a medida que envejece.

Mejora tu salud

Existen numerosas ventajas para la salud de la aptitud física. El ejercicio regular y la actividad promueven músculos y huesos fuertes. Mejora la salud respiratoria, cardiovascular y la salud general. Mantenerse activo también puede ayudarlo a mantener un peso saludable, reducir el riesgo de diabetes tipo 2, enfermedades cardíacas y reducir el riesgo de algunos tipos de cáncer.

En otras palabras, la actividad física es una parte crucial para mantener una buena salud y bienestar.

Estas son las pautas de para niños, adultos, adultos mayores de 65 años y mujeres embarazadas o postparto.

Anime a su familia a ser más activa y desafíese a sí mismo a cumplir con las metas de actividad física diarias o semanales. Practique deportes al aire libre con toda la familia, programe un horario cada día para ir al gimnasio o elija pasatiempos saludables y activos como el senderismo o el ciclismo. Haga que el ejercicio y la actividad física sean una parte permanente de su rutina diaria.